lunes, 11 de junio de 2012

Juventud: la incógnita social


A muchos se les escucha decir: ‘soy joven aún’, ‘tengo espíritu joven’, ‘vivo mi vida al máximo, no he dejado de ser joven’, pero ¿qué es ser joven? ¿qué es juventud? ¿en qué radica ser o sentirse joven?. Si lo consideramos como una etapa física del cuerpo de una persona, es decir una edad, podría funcionar la clasificación y dejaría claramente enmarcado el espacio al que hace parte un joven. En la actualidad, la edad para muchos no significa más que una cifra, un dato, un número sin mayor relevancia o trascendencia. Algunos dicen ‘la madurez la dan los daños y no los años’ y asumiendo que la madurez es el momento en el que tomas con mayor responsabilidad y seriedad tu vida y lo que te rodea, entonces, ¿qué me hace ser joven o sentirme joven? ¿es un estado mental? ¿es pasajero o realmente supera las barreras del tiempo, convirtiéndose en actitud permanente?

En el libro Viviendo a toda, nos relatan como la juventud puede ser estudiada como un estadio intermedio entre la niñez y la adultez, dos conceptos sociales determinados por ciertos parámetros. Mientras que la juventud es cambiante, es un transito entre una y otra, pero ¿qué es lo que hace que una persona se sienta joven? Nos mencionan el hecho de que las clases media - alta pueden acceder a ciertos accesorios, lugares, ropa y elementos que son vendidos como parte de la identidad de un joven. Podría entonces, la juventud estar marcada y determinada por modas o mercancía vendida a través de los medios. En este aspecto, el texto también nos hace referencia a las clases que no tienen la capacidad para adherirse a estas reglas vendidas por la sociedad, ¿no son jóvenes?

No todo lo que es un joven, hace parte de lo que la moda le ‘impone’, pero algo que si lo caracteriza es el contexto social e histórico que lo rodea. No es lo mismo haber crecido en la Bogotá de 1948 a la del 2000. Y es entonces cuando el libro nos habla de las generaciones. Espacios de tiempo que permiten que un grupo de personas pueda sentirse identificada y familiarizada entre sí, por lo que ese contexto en el que crecieron, les es conocido. Personas de la misma generación se pueden mostrar apoyo, ya que hay aspectos del momento histórico en el que se desarrollaron como personas y ciudadanos. Pero, que pasa cuando ese grupo de personas, de una generación como la de las últimas dos décadas, quiere levantar la voz sobre algo que le disgusta dentro de su comunidad ¿serán señalados como jóvenes revoltosos?

En el texto, Jesús Martín Barbero nos habla sobre el des-orden social y los jóvenes como actores sociales. ¿Qué relación existe entre la juventud y la criminalización de la imagen de los jóvenes? Él nos hace referencia al libro del comunicador social Alonso Salazar, No nacimos pa’ semilla, donde él hace un trabajo de investigación sobre los jóvenes de los sectores popular en la ciudad de Medellín. El joven como sicario, bajo la violencia juvenil donde es visto más allá del hecho actual, de la predisposición a encasillar al joven como una persona con mente delincuencial y rebelde. Es un contexto más profundo, que viene desde el tejido social y los rasgos que, en este caso, la comunidad antioqueña resalta.  

Ahora veamos, la juventud como una actitud reflexiva, observadora que no está de acuerdo con lo que la sociedad en la que se desenvuelve, ignora o deja pasar por alto. Es esa actitud la que las generaciones antecesoras denominan como una juventud sin valores, pérdida, desubicada, pero es porque deciden decir en voz alta lo que los demás callan. La sensación de estar en un momento temprano de la vida, donde la muerte es vista como lejana y distante, donde los años venideros son muchos y el momento actual es para disfrutar y actuar. Así puede verse y sentirse la juventud, y es tal vez esa sensación de inhibición la que hace que los jóvenes actúen según su parecer y no por el trazado que las personas mayores han hecho para ellos.

Partiendo de este punto, hablaré sobre la película del año 1998, del director Tony Kaye: Una historia americana x. Esta es la historia de Derek Vinyard, un joven que hace parte un grupo llamado Los discípulos de Cristo, de una ideología neonazi. Él es encarcelado por asesinar a dos jóvenes afroamericanos. Mientras permaneció en la cárcel, se dio cuenta de que aquello en que creía ciegamente, era falso. Al salir se da cuenta de que su hermano, sigue sus pasos y él busca la manera de hacerlo cambiar de opinión, para que no termine igual que él. Aquí podemos ver, algo de lo que nos dice Martín-Barbero en Viviendo a toda, y es que como comunidad y sociedad debemos preguntarnos, que tan justos somos al juzgar a los jóvenes por sus comportamientos poco comunes o diferentes a los de nuestros padres o abuelos, si viven rodeados de un mundo de doble moral, donde te quejas de la situación pero no haces nada para cambiarla para bien, o donde el que es más vivo y más audaz para hacer trampa o tomar ventaja sobre alguien es más aplaudido que alguien que se esmera por lograr un buen trabajo, con ética y responsabilidad social. O más aún, donde nos asombramos por la violencia de nuestro país, de las injusticias, de la corrupción, pero preferimos respirar profundo y pasar el mal rato viendo el reality de moda. Es una sociedad que es vista como hipócrita, silenciosa y resignada, una sociedad en la que los jóvenes se sienten fuera de lugar y se niegan hacer parte de ella.

Sin embargo, no quiere decir que justifique, en el caso específico, la actitud y el comportamiento de los personajes de la película Una historia americana x, porque a mi manera de ver, actúan dominados por sentimientos de frustración, ira, dolor y tristeza, situación que en este caso es aprovechada por Cameron, un veterano con ideales de más de 40 años, que considera racional y natural que el hombre blanco americano sea quien tenga el poder absoluto, donde las demás personas, como afroamericanos, judíos, asiáticos y latinos, deben ser eliminados. Una mentalidad neonazi, que sobrevive al pasar de los años para exaltar la ‘raza pura’, parte de la ideología nazi, que nace en los años 30 y consigue su mayor poder cuando Hitler pasa de ser canciller a Führer en 1934. Persecución, represión y control de Alemania bajo el mando de Adolf Hitler. Esa ideología que perdura al paso del tiempo (neonazi), y llega a lugares como Argentina, Chile o Colombia.

Pero ¿de qué manera la juventud puede hacer parte de ideologías como la neonazi? En la película de Dennis Gansel del 2008 llamada La Ola, donde hace referencia a un experimento llamado La Tercera Ola hecho en 1967, por un profesor de un instituto en California. La idea es que él quiere mostrarles como en una sociedad libre y abierta, la idea de un sistema de gobierno autoritario y dictatorial no deja de ser atractivo. Le asigno un rol de comunidad al grupo de jóvenes, dejando claras las reglas del mandato: uniformes, saludo, logo etc. Hay un momento en que los estudiantes, han interiorizado de tal manera el rol que desempeñan, que el caso se sale de las manos del profesor. Los jóvenes se pueden dejar atraer por ideas y conceptos que pueden mostrarles ‘vías alternas’ a aquello por lo que se sienten inconformes o disgustados y sin más, sin darse cuenta hacen parte de estas ideologías masivas que en algunos casos puede estar persiguiendo otros intereses.

A manera personal, considero que el ser o sentirse joven, radica en el hecho de tener vivo un espíritu de búsqueda, de curiosidad, de cambios y de darse cuenta que si algo no nos gusta, podemos buscar una solución. Un ejercicio para socializar la manera en que pensamos, actuamos y sentimos, una sensación constante que aunque el hoy es lo que cuenta, el futuro parte de nuestro presente, lo que hagamos o dejemos de hacer en este momento genera reacción en lo que viviremos después. Despertar la conciencia de que no somos un cero a la izquierda, ni un eslabón intermedio, sino que somos parte activa y participativa de nuestro contexto social e histórico, y que estamos hechos para grandes cambios; con sensatez, para cambios positivos. Esa es la juventud, una actitud propositiva.


Ensayo (La Ola, Una historia americana X, Viviendo a toda)
Edna Patricia Lara B. - Estudiante de Comunicación Social 
Fundación Universitaria San Alfonso.